Nº de jugadores: De 1 a 10. En teoría no hay un límite establecido pero no es plan de ser confundido con una banda de latin kings.
Material: Unas zapatillas y ropa cómoda que te permita huir a escape de la zona de juego. Un dicción clara es valiosa para aumentar las posibilidades de victoria.
Valores que fomenta: Don de gentes, aplomo, ingenio, el hijoputismo
Lugares donde practicarlo: Ciudades dormitorio con altos edificios, aunque con un edificio con portero automático basta.
Reglas: El Cascarrabias es un juego muy sencillo y cualquiera puede practicarlo. Consiste en ser el primero en encontrar al vecino más cascarrabias de la comunidad elegida como campo de juego. Los distintos participantes irán pulsando el telefonillo de un piso a su elección, por turno. Cada jugador tiene una única frase para sacar de quicio al vecino en cuestión. Si la respuesta a dicha frase es un exabrupto, el jugador gana.
Si habiendo llamado a todos los pisos no se dilucidara un ganador, se procederá a continuar con el juego en otro edificio de la zona.
No está permitido los insultos directos ni las alusiones a los antepasados o preferencias sexuales de quien responde.
En la variante para un solo jugador el objetivo es encontrar al cascarrabias en el menor numero de intentos y posteriormente tratar de superar el record. En zonas donde la educación y el sentido cívico están más extendidos como el país vasco o cataluña, con un sonoro ¿que? será suficiente para alzarse con la victoria
Ejemplo:
Jugador 1 y Jugador 2 se dirigen al extrarradio de una de las ciudades más importantes de España. El edificio objetivo es elegido al azar. Pandoro II, como su nombre indica, segunda y ultima fase del complejo Pandoro, que debido a la crisis inmobiliaria jamás se verá finalizado por completo.
Jugador 1: Bien, voy a elegir el 3º D. La D por la talla de sujetador de mi novia y el tres por el número de mis testículos.
Jugador 2: Oh venga, ese dato sobraba y lo sabes.
Jugador 1: Cállate Paco que me estropeas la jugada.
Jugador 2: Ah, muy bien. Ahora soy Paco ¿no? Cuatro meses llamándome Jugador 2 incluso en las reuniones familiares y ahora de pronto soy Pa...
Vecina asombrada: Si, ¿quién es?
Jugador 1: Hola Encarni, baja que te voy a dar lo tuyo en el portal.
Vecina asombrada (mirando por la ventana a ver si le merece la pena bajar): No perdone, se ha equivocado.
Jugador 2: Qué mala suerte has tenido. Has ido a elegir a la única monja del bloque. Mi turno. Yo escogeré el 6º B Estaba en esa clase el año en que aprobé por primera vez matemáticas.
Vecino anodino: ¿Si?
Jugador 2: Cartero comercial.
Vecino anodino: Your father!
Jugador 2: ... Creo que no me ha entendido
Jugador 1: Demasiado bien te ha entendido, pero no valen los insultos en otro idioma que los oficiales del estado.
Jugador 2: Eso no es justo.
Jugador 1: Cállate anda. Luego te doy un Phoskitos. A ver si tengo más suerte. 1º A.
Vecino suspicaz: ¿Quién anda ahí?
Jugador 1: Paga moroso que sabemos que debes hasta la partida de nacimiento.
Vecino suspicaz: ¡¿Cómo?!
Jugador 1: Ah, ya he ganado.
Jugador 2: De eso nada. En esta región del país no se habla un idioma propio cuyo uso haya desarrollado un acervo cultural y, por extensión, una identidad única paralela a la global hispana. Así que más suerte la próxima vez. A ver si el 1º B no me falla.
Vecino típico: ¿Qué quieres?
Jugador 2: ¿Tiene usted pelos en la lengua?
Vecino típico: Solo cuando tu madre me dice que le com...
Jugador 2: ¡He ganado!
Material: Unas zapatillas y ropa cómoda que te permita huir a escape de la zona de juego. Un dicción clara es valiosa para aumentar las posibilidades de victoria.
Valores que fomenta: Don de gentes, aplomo, ingenio, el hijoputismo
Lugares donde practicarlo: Ciudades dormitorio con altos edificios, aunque con un edificio con portero automático basta.
Reglas: El Cascarrabias es un juego muy sencillo y cualquiera puede practicarlo. Consiste en ser el primero en encontrar al vecino más cascarrabias de la comunidad elegida como campo de juego. Los distintos participantes irán pulsando el telefonillo de un piso a su elección, por turno. Cada jugador tiene una única frase para sacar de quicio al vecino en cuestión. Si la respuesta a dicha frase es un exabrupto, el jugador gana.
Si habiendo llamado a todos los pisos no se dilucidara un ganador, se procederá a continuar con el juego en otro edificio de la zona.
No está permitido los insultos directos ni las alusiones a los antepasados o preferencias sexuales de quien responde.
En la variante para un solo jugador el objetivo es encontrar al cascarrabias en el menor numero de intentos y posteriormente tratar de superar el record. En zonas donde la educación y el sentido cívico están más extendidos como el país vasco o cataluña, con un sonoro ¿que? será suficiente para alzarse con la victoria
Ejemplo:
Jugador 1 y Jugador 2 se dirigen al extrarradio de una de las ciudades más importantes de España. El edificio objetivo es elegido al azar. Pandoro II, como su nombre indica, segunda y ultima fase del complejo Pandoro, que debido a la crisis inmobiliaria jamás se verá finalizado por completo.
Jugador 1: Bien, voy a elegir el 3º D. La D por la talla de sujetador de mi novia y el tres por el número de mis testículos.
Jugador 2: Oh venga, ese dato sobraba y lo sabes.
Jugador 1: Cállate Paco que me estropeas la jugada.
Jugador 2: Ah, muy bien. Ahora soy Paco ¿no? Cuatro meses llamándome Jugador 2 incluso en las reuniones familiares y ahora de pronto soy Pa...
Vecina asombrada: Si, ¿quién es?
Jugador 1: Hola Encarni, baja que te voy a dar lo tuyo en el portal.
Vecina asombrada (mirando por la ventana a ver si le merece la pena bajar): No perdone, se ha equivocado.
Jugador 2: Qué mala suerte has tenido. Has ido a elegir a la única monja del bloque. Mi turno. Yo escogeré el 6º B Estaba en esa clase el año en que aprobé por primera vez matemáticas.
Vecino anodino: ¿Si?
Jugador 2: Cartero comercial.
Vecino anodino: Your father!
Jugador 2: ... Creo que no me ha entendido
Jugador 1: Demasiado bien te ha entendido, pero no valen los insultos en otro idioma que los oficiales del estado.
Jugador 2: Eso no es justo.
Jugador 1: Cállate anda. Luego te doy un Phoskitos. A ver si tengo más suerte. 1º A.
Vecino suspicaz: ¿Quién anda ahí?
Jugador 1: Paga moroso que sabemos que debes hasta la partida de nacimiento.
Vecino suspicaz: ¡¿Cómo?!
Jugador 1: Ah, ya he ganado.
Jugador 2: De eso nada. En esta región del país no se habla un idioma propio cuyo uso haya desarrollado un acervo cultural y, por extensión, una identidad única paralela a la global hispana. Así que más suerte la próxima vez. A ver si el 1º B no me falla.
Vecino típico: ¿Qué quieres?
Jugador 2: ¿Tiene usted pelos en la lengua?
Vecino típico: Solo cuando tu madre me dice que le com...
Jugador 2: ¡He ganado!