La Rosa y el Látigo (VI)

Siempre que uno cree que ya lo ha visto todo, surge algo que le sorprende aun más. Y eso es lo que me ocurrio cierta noche de febrero hace algunos años. Estaba animado por un motivo que no logro recordar, supongo que alguna tonteria, asi que me conecte al chat con la esperanza de tener un golpe de suerte y encontrar una sumisa o de no ser posible, simplemente pasarlo bien. Tras un par de cibersesiones descafeinadas sin un mínimo de excitación, el pensamiento de pasarlo bien se habia desvanecido de mi mente, ocupando su hueco el deseo de comer un gran trozo de pastel de chocolate.

Ya me disponia a iniciar mi expedicion a la nevera, cuando una "chica" me hizo un privado (nunca suelo hacer un privado yo, a menos que tenga un presentimiento con algun nombre, el motivo es demasiado aterrador como para contarlo aqui). Llevaba por nick sexynurse; encontrarse un nick asi en internet es clara evidencia de que alguien con el suficiente vello corporal como para rellenar una almohada se escuda tras el, pero aburrido como estaba decidi seguirle el juego con la esperanza de que tarde o temprano cometiera un error del que poder mofarme; ademas estaba la remota posibilidad de que mi interlocutor fuera una mujer y enfermera, fantasia erotica del 99% de los hombres (el 1% restante está casado con una por lo que no se contabilizan).

Tras la conversacion de rigor (como estas? de donde eres?, cuales son tus medidas? te gusta el pimiento?.....) la chica se impacientó, asi que cuando me dijo "dame caña" deje de lado la etiqueta y me dispuse a llevarla al limite del delirio sexual (esta frase la aprendi de una peli porno sueca, subtitulada claro) Me comento que estaba de enfermera cuidando a una anciana, con ella vivia su nieta, una chica muy guapa por las fotos que me mando, pero que se portaba muy mal con la enfermera, como en el cuento de cenicienta vaya. Mi primera orden fue que se desnudara, pero ella no podia hacerlo porque la anciana a la que cuidaba estaba al quite, y hay un antes y un despues de ver a tu enfermera como dios te trajo al mundo (antes del paro y despues del paro), asi que la chica decidio dormir con cloroformo o alguna droga parecida a la abuela.

Despues del ancianicidio, la enfermera estaba a mil, con solo cruzar las piernas, oleadas de placer hubieran estallado en su interior, atravesando su medula espinal para finalmente desembocar en su cerebro produciendo lo que los franceses llaman la petite morte, asi que decidi "aplacarla" un poco con cera caliente (en proximos capitulos hablare de las practicas D/S)

Acababa de encontrar una vela cuando llamaron a la puerta, la nieta habia vuelto, frustrando el orgasmo virtual que pretendia conseguir mi enfermera. Ciega de lujuria, a sexynurse no se le ocurrio otra cosa mas que drogar a la nieta y de paso "jugar" con ella, cosa a la que me negue, pero el deseo pudo más que mis ordenes (por lo visto, no solo los hombres tenemos dos unidades de pensamiento autonomas). Asi que tras inyectarle un somnifero, se vio con el cuerpo inconsciente de una ninfa de 19 años que le habia hecho la vida imposible durante el tiempo que llevaba cuidando a su abuela. Tras pedirme consejo y no hacerme ni caso, ato a la nieta boca abajo a su cama, cogió una botella de vino que por lo visto guardaba para ocasiones especiales, y de nuevo busco mi aprobación para introducirle la botella en el punto exacto donde termina el aparato digestivo, donde la espalda pierde su nombre, entre los dos mofletes..., en el culo vaya, pero una vez más no me hizo ni caso. Asi que sin dilatación previa procedio a penetrar el supuestamente virgen trasero de la nieta mientras un consolador de 20 cm se hundia en sus entrañas. Hasta entonces pense que todo era simplemente producto de la imaginación de alguien con mucha imaginación, pero decidi que farsa o no aquello debia terminar. Le dije que era policia, nada más leerlo, desconecto y no volvi a saber mas de ella. Desde entonces, ya si que lo he visto todo.
Compartir:
spacer

No hay comentarios:

Publicar un comentario