Juegoxxx VII: Megatech Software

Hubo toda una generación, que recorrió los mundos de Hyrule a manos de un elfo llamado Link, con el sagrado deber de reunir la trifuerza del poder y salvar a la princesa Zelda del malvado Ganondorf. Esa generación creció, y aunque los videojuegos y el rol le seguian atrayendo, echaba en falta un aliciente algo más adulto en las historias. En definitiva, se preguntaba cómo le agradecia Zelda al esforzado heroe, el haber sido rescatada (y eso que los grafistas no se esmeraron con la pobre princesa)

Los japoneses, tan salidos ellos, llevaban años usando a chicas ligeras de ropa en todo tipo de juegos. Por contra, los occidentales sólo contabamos con el poderio físico de Elvira, a la hora de servir como reclamo para jugar a determinado título. Y vaya si funcionaba. Más de uno se dejo el sueldo en cartas a Fehergón, para que le ayudara a terminarse el juego y poder ver así el cuerpo desnudo de tamaña diosa de ultratumba.

Fue una empresa americana Megatech Software, la que supo ver el potencial de los juegos eróticos. El primero título con el que probaron suerte fue Cobra Mission, una aventura de detectives tipica, que destacaba por el uso tan normal que hacia de la sexualidad. Al fin y al cabo, los detectives de mentón duro y pitillo en ristre, también gustan de yacer con atractivas mujeres, y suelen interrogar a coleccionistas de fotos. Y eso es lo que hacia Jr (el prota) en Cobra City, para desentrañar el misterio que se ocultaba tras la desaparición de varias chicas.

Cobra Mission puede que fuera el titulo más jugado en los institutos de secundaria de este pais, con permiso de Doom. Los discos de 3 1/2 circulaban de mano en mano, a la misma velocidad que el cleenex aumentaba de precio en el mercado negro, e incluso las chicas, ajenas por aquella época a todo lo que tuviera botones, se mostraban curiosas ante tan picante fenómeno.

El juego hacia gala de unos gráficos más simples que un consolador de plástico. Todo el genio creativo lo derrocharian en las ilustraciones de las chicas que trufan toda la trama. Contaba con escenas interactivas de sexo, donde teniamos que usar determinados objetos según lo requiriera la situación, con el fin de conseguir una noche de pasion exitosa. Además, podiamos ir recolectando distintas imagenes, de chicas ligeras de ropa. El sueño de todo adolescente sobrehormonado.

La mezcla de aventura y explosivas chicas, funcionó a las mil maravillas, y la empresa decidió volver a publicar otro título, algo más "serio". Antes probó suerte con Metal & Lace, un juego de lucha protagonizado por bellas adolescentes, que manejaban con mano de hierro, enormes robots que se partian la cara por ellas (real como la vida misma); pero pasó sin pena ni gloria, porque las ilustraciones eróticas eran escasas y coincidio en el tiempo con la bestia negra de los recreativos: Street Fighter 2.

Este pequeño bache no fue obstáculo, para que en 1995 distribuyeran en el mercado americano, Knights of Xentar, la tercera parte de la saga japonesa Dragon Knight. En esta ocasión, las escenas interactivas de sexo desaparecían, pero se potenciaba la carga erótica en dialogos e ilustraciones, contando el juego con dos versiones, una para menores de 18 años, con bonitos bañadores que cubrian los desmesurados atributos de las féminas, y otra para adultos, en la que no se ocultaba nada de nada.
Como juego la verdad es que era bastante adictivo, aún haciendo gala de una historia vista mil y una veces. A manos de Desmond, el tipico heroe de todo juego, debiamos recorrer un extenso paraje, luchando con monstruos, hablando con aldeanos, recolectando pociones y haciendo el amor siempre que pudieramos; el tipico plan de fin de semana.

Megatech desapareceria de la faz de la tierra en algun momento entre 1997 y 1999. Su ultimo juego publicado fue Power Dolls, juego de estrategia por turnos, basado en un anime no sexual (Igual por eso quebraron)

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