Nos encontramos en la era de los zombis, cuyo reinado no ha sido siquiera amenazado por los exitosos vampiros moñas de Crepúsculo, más afeminados si cabe que los de Anne Rice, que ya es decir mucho. Videojuegos, comics, series de televisión con el mérito de querer que todo el reparto muera devorado... y películas. Dentro de poco se estrenará en los cines de medio mundo Guerra Mundial Z, la adaptación a la gran pantalla de la obra maestra de Max Brooks en el que el mundo se enfrenta a la enésima invasión zombi a la que tendrán que hacer frente de la forma que saben hacer los americanos: con una guerra. Nos encontramos en el libro con una sucesión de entrevistas a distintos supervivientes de la guerra contra los muertos a través de las cuales descubriremos todo el proceso que se desarrolló desde el primer "infectado" hasta la posguerra misma, con una verosimilitud apoyada en detalles reales técnicos, políticos, sociales y militares, que te absorbe hasta el punto de llegar a dudar si te encuentras ante un documento oficial, el libro se supone que es parte de un informe para la ONU, o una novela.
Por los trailers vistos hasta el momento, la película se parece al libro como un huevo a una castaña pero solo por la esperanza de que alguien se coma a Brad Pitt, merecerá la pena. Y cuando digo comer no me refiero en el sentido que le gustaría a más de una/o.
Sin embargo, si lo que busca uno son zombis, muertos vivientes, infectados o votantes del PPSOE, donde encontrará una ración tan abundante que hará que se empache si trata de arramplar con todo, es en la literatura. Hace tiempo tuve una época gris en la que me quería morir y que de paso lo hiciera el mundo entero, porque, total, si hay que diñarla, que sea a lo grande. Por ello, empecé a leer todo aquel libro sobre zombis que cayera en mis manos. La relación entre ambos hechos es difusa, más que nada porque la primera premisa me la he inventado. Empecé a leerlos porque me desc..., saqué de la biblioteca un conjunto de libros de dicha temática que el bibliotecario gay, si todavía trabaja allí, había comprado, pues también es un gran aficionado al tema.
Tras leer casi una veintena de novelas sobre lo mismo, uno podría pensar que acabaría hasta los... no puedo decir "cojones" porque es muy mainstream, vamos, que uno acaba hasta los veinte de tanto gore, tanto preparacionista, tanto caminante putrefacto, tanto humano caníbal por necesidad o disfrute, tanto dilema moral y tanta muerte estúpida, porque las muertes producidas por zombis son estúpidas, salvo que los zombis corran, pero entonces ya no serían zombis, serían jamaicanos. El caso es que no, siempre tienes ganas de más y más. Por suerte siempre llega alguien que escribe como el culo y te quita las ganas. No hablaré de estos engendros, sino de otras que más o menos tienen su gracia.
Empezando por el clásico español, con mayúsculas, aunque yo no las escriba; un pionero que supo ver que el público hispano estaba ansioso de ver caminantes por las calles de su barrio y no en un lejano pueblo de Iowa, donde el maíz crece hasta el sol y las chicas son alegres. Me refiero a Manel Loureiro (si lo repites tres veces rápidamente te haces un esguince en la lengua) abogado de profesión y por ello gran conocedor de lo que es comer seres humanos crudos y arrebatarles hasta el alma, experiencias que le sirvieron para escribir su Apocalipsis Z.
No recuerdo cómo descubrí su blog en el que contaba, como si de su bitácora personal se tratara, como los zombis se iban apoderando del mundo y de su Galicia natal en particular. Visitaba su blog casi cada día en espera de una nueva entrada hasta que un día anunció que una malvada editorial publicaría un libro con su historia y solo en él podríamos encontrar el final. Por supuesto la gente de Internet se le echó encima, llamándole pesetero, agarrao, traidor, comunista nazi y demás lindezas, o al menos eso me dijeron.
La clave del éxito del blog y posterior novela, creo que fue su cercanía. Yo nunca he estado en Pontevedra, pero me imagino que para los lectores gallegos, el poder reconocer calles y lugares comunes debe ser muy satisfactorio; y aunque yo nunca he estado allí, una de mis ex era natural de Vigo, así que puedo comprender el terror que puede inundar sus calles perfectamente. El blog estaba escrito en primera persona, con un lenguaje muy directo, pues se trataba de anotaciones que Manel hacía en un supuesto diario que escribía tras determinado suceso o por la noche antes de ir a tocarse. A medida que la trama se fue desarrollando, estas entradas mutaron en algo más literario. La historia presenta un inicio clásico de tipo "Superviviente solitario" que va encontrando aliados y enemigos durante su búsqueda de un lugar seguro. Sin embargo en el segundo libro de la trilogía: "Los días oscuros", las cosas cambian.
En el mundo de la televisión, se define "saltar el tiburón" como un hecho extraordinario e inesperado que ocurre en una serie. Ejemplos de esto son los múltiples empleos de Homer en "Los Simpsons", los niveles de super guerrero en Dragon Ball Z, o Perdidos, que era toda en si un "saltar el tiburón". Pues bien, en la historia que continúa Apocalipsis Z hay tantos, que bien parece un espectáculo de Sea World. De entre todos ellos hay uno a destacar. ¿Hay alguien que fuera capaz de aguantar las carcajadas al oír hablar de los "froilos"? Sin desvelar mucho de la trama, decir que el autor recurre aquí a nuestra naturaleza guerracivilista, frente al desafío americano del héroe solitario frente a un mundo de salvajes de la carretera; un recurso que me pareció algo "fan service". Todo concluye en "La Ira de los Justos", un delirio digno del mejor Michael Bay, con un predicador sureño loco, marines estilo Soldado Universal, una cura milagrosa a la enfermedad que provocó el apocalipsis y un ejército de norcoreanos atravesando los USA de una costa a otra en busca de dicha cura; todo ello regado de muchas explosiones y tiros.
A decir verdad, pese a que como historia de zombis descarrila, sobre todo en su última entrega, la trilogía de Apocalipsis Z es totalmente recomendable y bastante divertida.
No era mi intención pero el siguiente libro que cayó en mis manos: Zombie Island, formaba parte también de una trilogía, que parecen estar de moda, aunque esta si es obra de un americano: David Wellington, primero de una serie que continua con Zombie Nation y finaliza con Zombie Planet y cuyos nombres dan una idea del ámbito espacial en el que tienen lugar. Es quizás el libro más atípico de los que he leído. Y es que no es muy normal encontrarnos con un inspector de armas de las Naciones Unidas, empotrado en un comando de niñas soldado somalíes que visitan Nueva York en busca de medicinas para el SIDA que mantengan con vida a la lider de su tribu. Una Gran Manzana, por supuesto, repleta de zombis... y de algo más. Es este rocambolesco inicio el que hizo que continuara leyéndolo tras un inicio excesivamente lento y un planteamiento en principio tópico en cuanto a su leit motiv: intentar sobrevivir en una ciudad repleta de seres aterradores dispuestos a usarte de aperitivo. Sin embargo ocurre algo que dará un giro a la historia y que te hará preguntarte qué demonios se le habrá ocurrido al autor en la siguiente página. Y así vas avanzando, a trompicones porque no es una lectura muy ligera, hasta llegar a leerte todos los libros por puro amor propio. Incide en la misma tendencia de las grandes sagas de zombis, en el canon establecido en los últimos años por series como The Walking Dead, en las que estos, conforme pasa el tiempo, dejan de ser el elemento aglutinador de la historia, la némesis incansable de los protagonistas, el terror primario, para pasar a formar parte del paisaje y ser meros comparsas que justifiquen los actos de los protagonistas. A los amantes de la casquería, aunque sea imaginaria les resultará un libro aburrido pese, o quizá por ello, a los toques (muy) fantásticos que van in crescendo a medida que la historia se acerca a su final.
Puede que las historias de zombis no cansen, pero tener que esperar tres libros para descubrir su final si. Por ello, mi siguiente elección fue una novela más bien corta con un enfoque totalmente distinto a los anteriores: Nueva York: Hora Z de Craig DiLouie, que narra las desventuras de un pelotón de marines americanos desplegados en Manhattan durante los comienzos del estallido de una plaga de efectos desconocidos. Está enfocado desde un punto de vista militar, con una profusión de términos militares bañados en el famoso sentimiento de hermandad presente en las fuerzas armadas, del estilo "el mundo se está derrumbando pero todavía nos tenemos los unos a los otros" o "Luchamos por el que tenemos al lado", lo que lo convierte en un "Black hawk derribado meets the zombies", aunque sin la maestría de la obra de Ridley Scott claro. Un libro correcto, bien escrito, ligero y diferente, en el que no tenemos una visión global del conflicto como en la obra de Brooks, sino una visión más claustrofóbica y quizás más cruda.
Quizás poseído por el espíritu de los seres cuyas historias devoraba, me lancé de cabeza a por otro titulo que saciara mi apetito. En otro universo más condescendiente, estaría devorando rubias, morenas, pelirrojas y calvas, pero aquí estamos y lo único que me puedo permitir son libros, como El alzamiento, de Brian Keene. Cuando empecé este libro desconocía que se trataba de una bilogía, o trilogía incompleta, como os suene mejor, sorpresas que me llevé en las ultimas paginas. Todavía no se si agradable o no. Esta historia se aleja del estereotipo zombi. De hecho los muertos vivientes no son zombis ni infectados, son... españoles. Se mueven, hablan y actúan como seres humanos, pero como unos seres humanos muy hijodeputas, cuyo único objetivo es acabar con todo lo que encuentren a su paso para luego ir a dar por saco aún más allá. Ante esta capacidad motora e intelectual en la jauría humana, es irremediable preguntarse y decirse en voz alta en más de una ocasión, como es posible que los protagonistas permanezcan con vida durante tanto tiempo. No desvelaré mucho, pero en su continuación La ciudad de los muertos, tras un claro, clarisimo, diáfano, cristalino, prístino, inapelable... vamos, que prácticamente lo han copiado, homenaje a la película de Romero: La tierra de los muertos vivientes, seremos testigos de uno de los mejores finales que se pueden encontrar en el subgénero.
Finalmente, harto de tener que estar informándome antes de si un libro tenía o no secuelas, intentar buscarlas, encontrar algunas, amenazar al librero para que me encargara otras y demás esfuerzos absurdos pudiéndomelos descargar cómodamente, decidí darle una oportunidad a sendas antologías de relatos, de los que no suelo ser muy aficionado. La primera lleva el original título de Antología Z, colección de relatos de autores españoles, lo que explica el título, bastante originales unos, otros más bien recopilaciones de tópicos del género, incluido el punto de vista de un muerto viviente. Si tuviera que seleccionar alguno, sería el último relato, ambientado en el espacio. Como cada texto es de su padre y de su madre, los estilos son muy distintos, aunque salvo alguna excepción, todos se dejan leer de forma ligera y agradable dejándote en ocasiones mal cuerpo, lo cual es de agradecer.
Para finalizar, le di una oportunidad a La Marcha zombi de Max Brooks, cuatro relatos que bien podrían considerarse descartes de Guerra Mundial Z. Y es esa la sensación que te dejan, la de encontrarte ante un texto que no está a la altura y que si no ha sido borrado del ordenador del autor es porque los de la editorial querían rascar más dinero. Quizás por ello en esta estación me apeé y dejé de lado a estos adorables comedores de carne que estarán de moda mientras las sociedades se comporten como borregos sin cerebro.
Literatura muerta
Moreno, 1.80, ojos verdosos. Discreto. Acudo a domicilio. Antes interesado en mujeres muy muy adineradas; ahora solo en mujeres de cálida sonrisa y magnética personalidad.
Uf. A mí el rollo zombie no me va nada, con la honrosa excepción de The Walking Dead.
ResponderEliminarLa serie no, mira, ya me he quitado.
¿Qué es lo que te llama la atención de The Walking Dead? La serie desde luego es para tirarse por un puente sobre un lecho de cactus no eróticos.
ResponderEliminarBesos guapa!
jajaja, cactus no eróticos??? ignoraba que existieen!!!
ResponderEliminarCurioso el fenomeno de la telenovela "walking dead", que arrastra a las féminas a devorarla sin mesura. Les gusta más que "pasión de gavilanes", y eso que en la de zombis no salen torsos acerados del otro lado del atlantico.
Yo soy más fan del comic (dicho esto mientras me ajusto el monóculo), y si hubiese un libro sería más devoto de este, faltaría más!!!
Por otro lado y aludiendo al fenomeno publicacional zombi creo que la editorial Dolmen se cavando su tumba sacando tanto subproducto, que ya se sabe: lo poco gusta y lo mucho cansa.
Tambien anhelo que Brad Pitt sea devorado por una no-muerta Paz Padilla!!!
Un fuerte abrazo!!!
Saluditos Moriarty, esta entrada me viene que ni pintada :)
ResponderEliminarSoy hipermegasúperfan fan fan fan de los zombies. Es una temática que me apasiona (mis gustos siniestros contrastan impactantemente con mi imagen dulce y angelical, pero esa es otra cuestión).
A lo que vamos, estoy con La Ira de los Justos. Esta trilogía me está gustando muchísimo. Me los estoy "devorando" (ups, guiño guiño XD). El primero desconcertante, sobre todo por la forma en que está narrado. Ya me enteré de toda la movida, qué crack el Loureiro éste escribiéndolo en su blog. Imagino que hubo legiones de lectores enganchados. A partir del segundo se agradece la mejora literaria de estilo, no para tirar cohetes, pero el formato blog saturaba un poco. Como dices, en el tercero la historia está degenerando un poco con los fanáticos religiosos éstos en "misión divina" y el predicador líder... tócate el kiwi!!!
Pero vamos, que yo estoy enganchadísima. Ha sido un gran descubrimiento esta trilogía.
Tomo nota de los demás libros que comentas para cuando me dé otro arrebato zombiniano de los míos :P
The Walking Dead... pffffffffffffff ha mejorado algo en la primera mitad de la T3 pero qué decepción en la season finale.. puaggg. No, no es una serie de zombies. Los pobres están ya de atrezzo y les han perdido el respeto absolutamente. Qué lástima. Y los protagonistas, son para darles palos a más de la mitad...
Ains, me enrollo. ¿Ves? es que el tema me pone XDDDDD.
Besitos, niño!!!
La serie, como decía, no. El comic... no sé. Lo de los zombies no me llama nada pero me regalaron los libros y los leí. Pero la serie, quitando de los tres o cuatro primeros capítulos, NO.
ResponderEliminarA mí me costó 2 temporadas "aceptar" la serie tal como es, porque yo, en mi desconocimiento del cómic, esperaba ver "una serie de zombies" en toda regla.
ResponderEliminarPsss... al final resulta que están más de decorado que de otra cosa, la base son unos personajes cansinos y poco atractivos en su mayoría, con poco gancho, y sus dilemas morales y blablabla. La serie a ratos aburre, a ratos decepciona, a ratos se anima... en fin, a mí me entretiene pero poco más.
Ah, se me olvidó comentar que estoy DESEANDO que se estrene Guerra Mundial Z. El trailer es brutal y tengo mucha fe en Brad, pedazo de actor :)))
Jajaja sobre los cáctus eróticos hablaré algún día Fran; cuando la sociedad esté lista :)
ResponderEliminarTanto Dolmen como otras editoras están haciendo lo que siempre pasa aquí, explotando la gallina de los huevos de oro hasta que solo ponga huevos de cartón. Es un fenómenos similar a las películas ambientadas en el espacio tras el éxito de Star Wars, solo que sin joyas como el "Star Wars turco".
Jajajaj no se me ocurre nadie mejor para comerse a Brad Pitt que Paz Padilla la verdad.
Sobre The Walking Dead, he descubierto que hay un libro con colaboración de Kirkman, con el original título de "The Walking Dead - El Gobernador", que la verdad es que no me llama mucho porque estando ya muerto y enterrado el personaje, lo que hiciera antes de volverse necrófilo no me interesa demasiado por ahora. Ah, si no has jugado a la aventura gráfica de The Walking Dead, tienes que hacerlo. Lo mejor que he probado en años.
Bueno Aliena, si me dices que te gusta Troll 2 ya gustos más siniestros no puedes tener :) Espero no haber desvelado mucho de La ira de los justos. Ya me contarás qué te ha parecido el final. A mi personalmente me pareció un bluff. Aún así es una saga muy entretenida si. De los que he leído, el más parecido a Apocalipsis Z es "Diario de una invasión zombi", que se puede decir que es similar a la obra de Loureiro en el planteamiento, incluso comenzó como un blog también, solo que el protagonista es piloto de las fuerzas aéreas y por tanto se desenvuelve mejor a la hora de liarse a tiros. Es más convencional y por tanto más aburrido.
Sobre The Walking Dead... Yo dejé los cómics por el número noventa y pico. Más que nada por la pereza de tener que buscarlos. Aunque la trama empezaba a resentirse y no avanzaba demasiado, seguía manteniendo el interés. Un día de estos tendré que volver a engancharme. La serie es todo un bluff. En un principio abominé de ella por no seguir fielmente los hechos de los cómics aunque luego cambié de opinión gracias a Juego de Tronos. En un principio vi la serie y como me gustó más o menos y animado por la gente que me recomendaba las novelas, les di una oportunidad, y no se si en las otras temporadas es distinto, pero la adaptación a la pequeña pantalla del primer tomo de Canción de hielo y fuego es casi perfecta. No se echa en falta en la primera temporada ni una sola página del libro, por lo cual, renuncio a enfrentarme a tochos de centenares de páginas y me esperaré a la serie.
Volviendo a The Walking Dead, el que serie y cómic sean distintos ofrecía la oportunidad de disfrutar dos veces de un mismo universo; por desgracia la serie es horrible.
El cómic también hace más énfasis en las relaciones personales entre supervivientes, pero no es tan lento y además los zombis no dejan de ser una amenaza. Casi siempre está pasando algo y aunque alguna trama se alargue no termina por saturar. El ritmo de la serie es tan lento que te puedes ver el primer capítulo y el último de la temporada y no te hará falta ningún otro, si además van eliminando personajes por discordancias con el productor, como fue el caso de Dale, pues tienes una mediocridad que sigo viendo por tradición.
Por cierto, doy por hecho que has visto "Dead Set" ¿verdad?
¡Besos para ellas, abrazos para ellos!
Ajá, apunto "Diario de una invasión zombie" aunque como dices, el encanto de Apocalipsis Z es la "normalidad" del prota (y el resto). Se trata de un tipo normal y corriente que de buenas a primeras se ve metido en el embolao más GORRRRDOOOO que nos podamos imaginar, el fin de la humanidad tal y como la conocemos!!! Me divierte mucho descubrir cómo se las va apañando, bastante bien por cierto, con sus limitados recursos y una flor en el culo más grande que la que poseía Louis Van Gaal cuando entrenaba al Barça XDDD. Puedo llegar a imaginarme en las situaciones que vive y fantasear sobre cómo actuaría yo. Empatizo bastante, vaya :)
ResponderEliminarMmmm Juego de Tronos. La serie me fascina. No había leído los libros y después de acabar la T2 me puse con el primero. Me aburrí soberanamente porque era calcado a la serie, bueno, al revés más bien, claro. Son pedazo de novelas guays pero no me motiva leer sabiendo exactamente lo que va a pasar, así que abandoné el primero. Después supe que en los siguientes libros la serie hace más versión libre, así que lo mismo un día de éstos retomo el segundo. Ahora mismo me da pereza. De momento espero a descarg... digo, tener la T3 completa para deleitarme a gusto :P
The Walking Dead la veo por inercia más que nada ya. Hombre, me entretiene a ratos pero fíjate que es la única serie que veo al mismo tiempo que la emiten. Las demás siempre espero a tener temporadas completas porque suelo enviciarme y me encanta tener la posibilidad de tragarme 2-3 episodios de una sentada. Con TWD me da tan igual esperar una semana o el mes de parón navideño... es que me la refanfinfla. Triste. Todo un blufff :(((
DEAD SET??????!!!! por favor por favor por favor, fue ÉPICA!!!! Aluciné en purpurina!!!! Una invasión zombi que se ceba con una cadena de televisión y los concursantes de Gran Hermano!!! ¿puede haber algo más bizarro? Ay, muy buena muy buena, GENIAL!!! Moló todo XDDDDDDDD.
Besos!
pd: ya te contaré cuando acabe con La Ira de los Justos
La cercanía de Apocalipsis Z es algo de agradecer, aunque sigue pillando algo lejos. Todavía está por escribir la gran novela malagueña de zombis :)
ResponderEliminarDe Juego de Tronos vi las dos primeras temporadas del tirón y ahora me arrepiento de seguir al día la tercera :P pero bueno, mientras no hagan un parón a mitad de temporada de un par de meses, ni tan mal.
Besos!
Uyyyy cuando llegue (que llegará, estoy convencida de esto, el fin de la humanidad será un virus raruno de éstos :P) nos refugiaremos en los túneles inacabados del Metro ¿sí, o qué? XD
ResponderEliminarAy ay, qué ganas de empezar GoT Season 3 ^_^.
Besos!
Jajaja el metro sería un escenario inmejorable, además con conexiones a la Maria Zambrano para saquear a gusto. Mira, me has dado una idea. Tendré que ir un día de estos a documentarme. Yo creo que si me pongo un casco ya me dejan pasar :)
ResponderEliminarLa 3ª temporada de GOT hasta el momento está manteniendo bastante bien el nivel. Espero que siga así.
Besos!!
Qué gran idea. Podemos ir ya haciendo expediciones nocturnas secretas y tatuándonos los planos en el cuerpo a lo Michael Scofield :O
ResponderEliminarSí sí sí y además en esta temporada también hay zombis en Invernalia ^_^.
Besos!
pd: estamos fatal de lo nuestro :PPP